Hilos, agujas, moldes, figurines y maniquíes rodean a esta costurera de barrio que encerrada a diario en la atmósfera sepia de su taller hace vestidos para ocasiones que ella nunca vivirá: casamientos, salidas románticas, bautismos.
Su única compañía en ese espacio reducido y sin luz natural son los fantasmas de las dos mujeres fuertes de la época (década del ’40), Eva Perón y Libertad Lamarque, dupla antagónica de estereotipos femeninos que siguen tan vigentes como entonces. En el fuego cruzado entre ambas quedará atrapada la pequeña costurera, cobrando un protagonismo impensado.
Así es Nada del amor me produce envidia, la bella obra escrita por Santiago Loza que reúne lo mejor del teatro independiente de Córdoba: talento actoral, hábil dirección, escenografía y vestuario exquisitos. Un monólogo protagonizado por Luciana Mealla Cincuegrani -bajo dirección de Lucas Leiva-, que se luce actuando y cantando tangos de Lamarque, Ada Falcón y otros.
Nada del amor me produce envidia | Trailer. from Toc Teatro on Vimeo.
Aquellos talleres de costura
La cuidada escenografía – de Natacha Chauderlot- recrea con recursos no previsibles la atmósfera íntima, femenina y algo opresiva de los talleres que las costureras de barrio solían tener en sus casas, esos que cualquiera que bordee las cuatro décadas de vida visitó en su infancia.
Hay, por caso, una antigua Singer a pedal que se fusiona de un modo especial al cuerpo de la costurera. Abundan moldes y figurines antiguos, en parte aportados por la propia protagonista, heredera de su abuela del amor por la costura y el manejo de ella.
El vestuario, creado por Paola Olivera, incluye ropa, zapatos, peinado y lencería que anclan perfecto en una mujer recatada de clase trabajadora de la década del´40; y colabora en crear la magia de la puesta en escena. Imperdible.
Dónde y cuándo. Todos los viernes de mayo, a las 22, en Espacio Máscara, La Rioja 836. Entrada y (jubilados y estudiantes. Reservas: Dejar mensaje al teléfono 4256678 o Facebook: Espacio Máscara Córdoba