La demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump pelean cabeza a cabeza, a sólo dos meses de las elecciones, presidir la mayor potencia mundial. Y en ese duelo reñido, un debate televisivo como el que protagonizaron este lunes 26 por la noche cobra una fenomenal relevancia.
Los candidatos a la presidencia de Estados Unidos mantuvieron por televisión nacional –retransmitido a todo el mundo a través de medios y redes sociales- el primero de los tres debates que planean sostener; seguido por millones de espectadores.
Se sabe que sobre la arena televisiva, la imagen –gestos, poses, vestimenta- comunica tanto como las palabras, y por eso es tan trabajada por los equipos de asesores como los discursos. ¿Qué dijeron Donald y Hillary por el canal no verbal? Sobre el tema consultamos a una experta: María Florencia Soto, licenciada en Ciencia Políticas y especialista en asesoría de imagen y comunicación.
Hillary Clinton: Roja dignidad
"En sus últimas apariciones públicas, Hillary Clinton eligió atuendos en color rojo, y lo mismo hizo para el debate. Fue una estrategia para contrarrestar la frialdad a la que se la venia asociando según los sondeos. Dejó de lado el negro, los grises y azules y optó por el rojo, el color de las emociones y las pasiones de la vida humana", explicó a María Soto a Musa.
"Mostró un estilo clásico pero fuerte, rojo más accesorios dorados dieron como resultado una 'dignidad poderosa' por definirlo de algún modo", agregó.
Sus gestos la mostraron segura, confiada y en control de sus ideas, como así también comunicaron mesura y empatía; apuntó la experta.
Y agregó: “El color rojo es la mujer de la política es muy cuestionado, pero creo que fue una apuesta acertada para romper también con esto de asociar a Hillary al status quo político estadounidense. Y por otra parte también ayudo a que desde lo visual hiciera frente a un contrincante con una imagen sumamente dominante".
Donald Trump: Azul para confiar
“Acostumbrados a verlo siempre de traje negro y corbata roja (que se traduce en autoritarismo total) en el debate lo vimos con corbata azul, como un recurso para comunicar más apertura y confianza en lo que puede lograr más allá de su inexperiencia política”, opinó Soto.
"No obstante, y fiel a su estilo, la corbata era de satén brilloso en lugar de una terminación opaca que hubiera transmitido más seriedad".
“Grave error que veo cada vez más en los políticos argentinos es el traje negro con corbata roja: la imagen que inconscientemente transmite es de cero apertura al diálogo”, opinó Soto.
Según dijo, la comunicación gestual de Trump (manos y cuerpo sobre el atril) transmitió pragmatismo y gran determinación. "Toda su gestualidad es avasallante", remató.